Características que debe cumplir el calzado sanitario

El calzado utilizado por trabajadores de entornos médicos y sanitarios debe tener unas características específicas diseñadas para cumplir con los estándares de higiene, comodidad y seguridad requeridos en esos entornos.

Además, deben estar preparados y elaborados para evitar infecciones, durar y resistir, así como cumplir con la normativa vigente en cada momento para este tipo de calzado.

Para ofrecer el máximo confort y seguridad, es muy importante que el calzado utilizado por sanitarios ofrezca las siguientes funcionalidades:

- Higiene: El calzado sanitario está diseñado para reducir la propagación de gérmenes y mantener altos estándares de limpieza. Al ser fácil de limpiar y desinfectar, ayuda a prevenir la contaminación cruzada y a mantener un ambiente limpio y seguro en hospitales, clínicas u otros entornos médicos.

- Prevención de infecciones: En entornos donde hay un alto riesgo de exposición a patógenos y bacterias, el calzado sanitario actúa como una barrera protectora. Al mantener los pies cubiertos y protegidos, reduce el riesgo de lesiones en la piel o infecciones para los trabajadores de la salud.

- Seguridad: Los zapatos sanitarios suelen tener suelas antideslizantes para prevenir caídas, que pueden ser peligrosas en entornos donde se manipulan líquidos, sustancias resbaladizas o en áreas con superficies irregulares

- Comodidad y soporte: Los profesionales de la salud pasan largas horas de pie, y el calzado sanitario está diseñado para brindar comodidad y soporte adicional para reducir la fatiga y el malestar durante las largas jornadas laborales.

- Cumplimiento normativo: En muchos entornos médicos, existen regulaciones y estándares específicos relacionados con el uso de ropa y calzado adecuados para mantener altos niveles de higiene y seguridad. El calzado sanitario cumple con estos requisitos normativos.

- Durabilidad y resistencia: El calzado sanitario está hecho con materiales duraderos y resistentes, capaces de soportar condiciones desafiantes y la exposición a desinfectantes y productos químicos utilizados en la limpieza.

Una vez identificadas las diferentes funciones que necesita cumplir el calzado sanitario, podemos adentrarnos en las características que se deben cumplir según estos criterios descritos.

- Material lavable y resistente: El calzado sanitario suele estar hecho de materiales que se pueden limpiar y desinfectar fácilmente, como plástico, cuero o materiales sintéticos que resisten la penetración de líquidos y sustancias.

- Antideslizante: Para reducir el riesgo de resbalones y caídas, el calzado sanitario a menudo tiene suelas antideslizantes que ofrecen un buen agarre en superficies resbaladizas.

- Cerrado y sin aberturas: La mayoría de los zapatos sanitarios tienen un diseño cerrado, sin aberturas ni porosidades donde puedan acumularse líquidos o bacterias.

- Confort y soporte: Aunque la prioridad es la higiene, el calzado sanitario también suele ofrecer comodidad y soporte para el usuario, con plantillas acolchadas o características ergonómicas que ayudan a mantener la comodidad durante largos períodos de pie.

- Resistencia a productos químicos: Dado que en entornos médicos pueden utilizarse desinfectantes y productos químicos para limpiar, el calzado sanitario debe ser resistente a estos productos para mantener su integridad y durabilidad.

- Transpirabilidad: Aunque el énfasis está en la protección y la higiene, muchos modelos de calzado sanitario están diseñados con materiales que permiten la ventilación para mantener los pies frescos y secos.

- Cumplimiento de estándares sanitarios: El calzado utilizado en entornos sanitarios debe cumplir con las regulaciones y estándares de seguridad y limpieza establecidos por las autoridades sanitarias.

Estas características varían según el fabricante y el tipo específico de calzado sanitario, ya sea zapatos, zuecos o botas, entre otros. Es esencial elegir el calzado que cumpla con los requisitos de higiene y seguridad necesarios para el entorno sanitario en el que se utilice.

El calzado sanitario es esencial en entornos médicos y sanitarios porque contribuye significativamente a la prevención de infecciones, al mantenimiento de altos estándares de higiene y seguridad, y a proporcionar comodidad para aquellos que trabajan en estos entornos. Su uso adecuado es fundamental para garantizar la protección de los trabajadores y la integridad del entorno de atención médica.