Buenas prácticas en soldadura
Por Worok
La soldadura lleva inherente gran cantidad de riesgos para los trabajadores que es importante identificarlos para llevar a cabo las medidas de prevención necesarias, así como conocer los equipos de protección adecuados y la forma de actuar ante caso de accidente.
La actividad de soldadura se lleva a cabo en múltiples sectores profesionales: construcción, mantenimiento industrial, metalurgia… Os mostramos los principales riesgos a los que un soldador se enfrenta, y detallamos una serie de buenas prácticas para desempeñar la actividad con total seguridad.
Prevención de riesgos laborales en soldadura
¿En qué consiste el trabajo de soldadura?
La actividad de soldadura es un procedimiento por el que se unen dos o más piezas mediante aplicación de calor, presión o ambos. El calor para unir las piezas puede ser generado por diversos procedimientos, siendo los más habituales la llama o arco eléctrico. Además de la unión de piezas, la soldadura realiza otras actividades como cortar, lijar o esmerilar, entre otros.
Toda esta actividad lleva inherente una serie de riesgos de diversa índole:
- Electrocución. Derivada del arco eléctrico.
- Quemaduras. Pueden ser provocadas por la proyección de partículas y residuos metálicos, por el contacto con superficies que presentan altas temperaturas, así como por radiación ultravioleta generada durante el proceso de soldadura.
- Explosiones e incendios. Provocados por las energías utilizadas durante el trabajo: chispas, gases, arco eléctrico…
- Inhalación de humos y gases. La composición de éstos dependerá de diferentes factores como el electrodo, los metales con los que se está trabajando, la temperatura, etc. La inhalación de estos gases puede provocar graves daños y está muy relacionada con enfermedades respiratorias como asma o bronquitis o incluso cáncer.
- Lesiones oculares. Tanto la proyección de partículas, como la radiación ultravioleta es muy peligrosa para los ojos, pudiendo provocar quemaduras u otras lesiones crónicas.
Para evitar estos riesgos, lo más importante es aplicar las medidas preventivas que nos permitan realizar la actividad de soldadura con total seguridad.
Buenas prácticas en el sector soldadura
El responsable de riesgos de la empresa analizará e identificará los riesgos a los que se enfrentan los trabajadores. Una vez analizados, se deberán implementar las medidas preventivas correspondientes para cada actividad que se desarrolle dentro de la empresa. Estas acciones variarán en función al puesto de trabajo, la actividad a desarrollar o la formación del trabajador.
- Poseer la formación adecuada. Una de las principales claves para evitar riesgos en soldadura es que el trabajador tenga la formación necesaria para la actividad que va a desarrollar.
- Elegir métodos de soldadura que emitan una menor cantidad de humos. Una de las principales buenas prácticas de soldadura que se pueden implementar es utilizar aquellos métodos de soldadura que emitan un menor número de humos. Algunos de estos son: soldadura sinérgica, soldadura por arco sumergido o soldadura con gas protector.
- Uso de sistemas de extracción de humo. Otra acción muy importante a realizar es la colocación de sistemas de extracción de humo de soldadura. Esto permite mejorar la ventilación del espacio y reducir en gran medida uno de los principales riesgos.
- Utilizar elementos aislantes siempre que se trabaje en contacto con superficies metálicas.
- Uso de sistemas de seguridad en el entorno de trabajo. Elementos de protección como las lamas o cortinas de soldadura permite proteger al personal ante incendios y contienen todo tipo de chispas, salpicaduras y proyecciones que puedan dañar instalaciones, equipos o materiales. Asimismo, se recomienda el uso de elementos de ventilación y gestión de humos especiales para soldadura.
- Uso de EPIs para soldador. Gafas, pantallas, mascarillas, protectores respiratorios… Según la actividad a realizar se deberá elegir el EPI adecuado para prevenir riesgos graves en cara, ojos, oídos y cabeza.
- Uso de calzado, guantes y ropa especial para soldadura. Igual que con el uso de EPIs, es imprescindible proteger las manos, el cuerpo y los pies para minimizar al máximo los riesgos. Existen multitud de prendas para adaptase a las diferentes necesidades: chaquetas, pantalones, camisas, delantales, mandiles… Así como calzado de protección con propiedades aislantes y guantes especiales para soldadura.
La actividad de soldadura lleva inherente múltiples riesgos que variarán según el sector, el material utilizado o el entorno de trabajo. Siguiendo estas buenas prácticas podréis identificar los principales riesgos y poner en marcha las acciones adecuadas para prevenirlos.
En Worok ofrecemos una amplia gama de equipos de protección para soldadura: EPIs, guantes, calzado, ropa, sistemas de ventilación y todo lo necesario para hacer el trabajo de soldadura completamente seguro.
Equipos de protección para soldadura